Crónica de un secuestro VI

No todos los muertos valen igual
Por Alvaeno Alvaeno

Releyendo a Orwell, 1984, sobre la distopía que narra esta obra hoy podríamos decir que ya ha dejado de serlo, para convertirse en una realidad aplastante. Sobre todo en lo referente a lo que nos dicen desde el Gabinete de la crisis sanitaria, que no debemos de creer en otras fuentes que no sean las oficiales, que llevemos a cabo las recomendaciones que se nos hacen desde el gobierno (por contradictorias que puedan parecernos) y que el mensaje oficial es el único al que debemos atender, no dejando aquí espacio ni para la disidencia, ni para otros testimonios que hacen otra lectura de toda esta narrativa sobre el COVID-19.

Vayamos por partes, y primero analicemos quiénes son la OMS, todos sabemos que es un organismo que vela por la salud mundial, hasta ahí, nada que decir, ¿no? Pues vayamos a ver quiénes son realmente los que manejan este organismo internacional y qué intereses defienden, a parte del consabido discurso del bien de la salud del mundo y de sus habitantes, seres humanos, claro, los animales y la naturaleza los dejamos para otros organismos. Bien, vamos a ver quiénes son estos señores:
OMS, en este enlace pueden ver cuáles son los compromisos que debe mantener esta organización, muchos de ellos no cumplidos, solo hay que echar un vistazo para ver que no todos se respetan: https://www.who.int/es/about/who-we-are/constitution

Yo me voy a quedar con estos puntos que analizaré en consonancia con la realidad:

• La desigualdad de los diversos países en lo relativo al fomento de la salud y el control de las enfermedades, sobre todo las transmisibles, constituye un peligro común.

En este primer párrafo ya podemos ver que esto no se cumple en la mayoría de los casos, porque sabemos que las desigualdades de los diversos países, no solo existen, sino que son fomentadas por las guerras, la expoliación de recursos (véase África, entro otros), y claro que esto supone un riesgo para la salud, sobre todo para la de esos países que son asolados por las guerras, las hambrunas y las enfermedades como el sarampión, la tuberculosis, el dengue, el ébola entre otras... Por tanto, no sé a quién defiende esta organización, bueno sí lo sé, y os lo contaré en este artículo.

• El desarrollo saludable del niño es de importancia fundamental; la capacidad de vivir en armonía en un mundo que cambia constantemente es indispensable para este desarrollo.

Pues a ver entonces cómo se permite que mueran cada día, sí, diariamente, en el mundo, bueno cada segundo: La cifra representa la muerte de un niño de menos de 15 años cada cinco segundos. Más de 6 millones de niños murieron el año pasado en el mundo. Si no se toman medidas urgentes, 56 millones de niños y niñas menores de cinco años morirán de aquí a 2030, la mitad de ellos recién nacidos", señaló en un comunicado Laurence Chandy, directora de Datos, Investigaciones y Políticas de Unicef.

• La extensión a todos los pueblos de los beneficios de los conocimientos médicos, psicológicos y afines es esencial para alcanzar el más alto grado de salud.

Aquí podemos ver cómo se está desarrollando una “guerra” comercial por la adquisición de material sanitario para afrontar al virus de marras, porque hay empresas que se están enriqueciendo con ello.

• Una opinión pública bien informada y una cooperación activa por parte del público son de importancia capital para el mejoramiento de la salud del pueblo.

Y este punto no tiene desperdicio porque nos dice que la única información que debemos aceptar es la que viene de ellos, de la OMS, que como dios se han convertido en omnipotentes.

Así que no creo que esta alarma desatada por el corona sea necesaria, bueno, sí lo es porque, sin restarle importancia al virus, obedece a determinados intereses, y claro, todos se suben al carro para sacar sus réditos, bien económicos, políticos o sociales, lo que sea, pero una vez se ha emprendido el camino, llevando a cabo las indicaciones de la OMS, no hay vuelta atrás, porque como he dicho al principio de este artículo, no hay lugar para la disidencia.

La OMS está financiada en su mayoría por grandes empresas que se dedican, entre otras cosas, a producir medicamentos y por ende vacunas etc.

En 2015, los laboratorios dieron, al menos, 30.966.248 dólares a la OMS en concepto de 'contribuciones voluntarias especificadas' (los donantes son quienes autorizan qué programas concretos pueden ser financiados con su dinero). El ranking de esas donaciones de las farmacéuticas lo encabeza GSK, dio 7.769.202 dólares, le siguen Novartis con 6.992.742 dólares y Sanofi, que aportó 6.158.152 dólares, pero no solo se cuelan las grandes multinacionales, también otras compañías más desconocidas como Labiofam, el laboratorio más importante de Cuba (Descarga aquí el listado completo de las compañías farmacéuticas).

En este documento también se publican las contribuciones "en especie" que la OMS ha recibido a manos de la industria farmacéutica, principalmente, medicamentos. Durante 2015, la Organización Mundial de la Salud recibió de estas compañías material valorado en 60.701.307 dólares. Los laboratorios que más aportaron fueron, una vez más GSK con más de 22 millones y Merck con 15 millones (Descarga aquí la aportación del resto de las farmacéuticas).

DONACIONES DE LA INDUSTRIA QUÍMICA, PESTICIDAS E INSECTICIDAS*
TANA NETTING		206.428
VESTERGAARD FRANDSEN		172.951
BASF		133.746
TAGROS		107.900
SHOBIKAA IMPEX		61.618
VALENT BIOSCIENCES		60.682
GHARDA CHEMICALS LIMITED		36.100
SAERFU AGROQUIMICOS		36.100
GOJO INDUSTRIES		20.065
HD HUDSON		20.000
SHARDA CROPCHEM		18.000
* en dólares
Fuente: Organización Mundial de la Salud
DONACIONES EN "ESPECIE" A LA OMS POR PARTE DE LAS FARMACÉUTICAS
GSK	22.656.948
MERCK	15.832.295
EISAI	10.199.320
NOVARTIS	9.170.188
BAYER	1.340.452
SANOFI ESPOIR	964.229
GILEAD	537.875
TOTAL	60.701.307
* en dólares
Fuente: Organización Mundial de la Salud

 

Ahí dejo los datos para que ustedes reflexionen, yo hago caso de aquellas frases populares que dicen: “Por dinero baila el perro” o esta otra de “Don dinero poderoso caballero”.

Ahora vayamos a los medios de comunicación, y tan solo voy a poner el ejemplo de George Soros, con este creo que es más que suficiente para poder demostrar que todo lo que recibimos como “información”, es el guión escrito de los poderosos, claro, a los que sirven, entre otros organismos: La OMS, la ONU, por citar a las más grandes organizaciones que supuestamente se dedican a trabajar para el bien del mundo.

Y tomo un párrafo de un artículo, del que dejo su enlace, porque merece la pena leerlo, para saber a qué nos estamos enfrentando actualmente, y la verdad es que no es muy esperanzador, pero es una realidad que debemos enfrentar y, en la medida de nuestras posibilidades, luchar, al menos para informar objetivamente y señalar a los auténticos enemigos del pueblo.

En resumen, Soros le enseña al periodismo una lección importante: la industria tiene futuro siempre que la billetera de los filántropos esté abierta. Pero la concepción de ‘sociedad abierta’ apoyada por el filántropo es una sociedad dependiente del dinero corporativo. Una interpretación bastante peculiar de aquella idea expuesta precisamente por Karl Popper en el segundo tomo de La Sociedad abierta y sus enemigos: «Si estamos en silencio, ¿quién hablará?». Ahora todos los medios tienen la capacidad de hablar, pero no de lograr cambios de calado, puesto que quienes corrompen el sistema democrático son los mismos que financian la profesión que debe soportarlo; el componente crítico del periodismo se diluye ante la hegemonía cultural dominante, como revelan los Papeles del Paraíso. Lo resumía a la perfección el escritor Martín Caparrós cuando hablaba precisamente de dicha filtración: «El periodismo es un engranaje necesario de este juego hipócrita: el que obliga a los gobiernos a decir, cada tanto, ‘Oh, qué sorpresa, aquí se roba’, y hacer como si fueran a hacer algo». Solo que el mercado ya ha superado a los gobiernos. El periodismo, inmerso en una crisis eterna, se encuentra en tierra de nadie batallando contra unos gigantes que no parecen ser otra cosa que molinos de viento. Como le ocurría al Don Quijote dibujado hace siglos por Cervantes.

Puedes leer el artículo completo aquí: https://www.lamarea.com/2018/05/20/george-soros-periodismo/

Creo que extenderse más no es necesario, ahora ya podemos saber que los que pensamos distinto, los que analizamos las situaciones, buscamos, investigamos, y dedicamos tiempo a la labor de estar atentos al guión oficial establecido, somos los disidentes de este sistema capitalista y atroz, y no soy el único disidente, por suerte somos muchos los que luchamos, los que nos salimos del guión establecido para señalar a los verdaderos culpables, porque no valen el mismo precio los muertos, no, y porque hay que señalar que han divido a los seres humanos en categorías y subcategorías, y que la muerte de 6 millones de niños no es declarada pandemia ni nada por el estilo por esos organismos que solo obedecen a sus amos, y que como el perro, nunca morderá la mano del que le da de comer, y aquí también entran los medios de comunicación, los políticos, los empresarios filantrópicos que donan dinero a causas “solidarias” cuando eluden los impuestos, y no solo eso, sino que explotan y maltratan a millones de trabajadores y trabajadoras en el mundo.

Salve, César, los que van a morir de saludan.

Puedes adquirir mi novela en este enlace: Matinal Costa de Madrid